El ambiente acogedor del hotel realmente me gustó.

Tuve una mala experiencia con un problema sério de agua. Nos quedamos sin agua durante horas, lo que fue muy complicado ya que teníamos planes. El hotel no ofreció ninguna solución ni compensación, lo que es inaceptable.

Una experiencia agradable

Estuve con mi pareja y la pasamos genial. La cama era super cómoda y realmente nos gustó el desayuno en la habitación. Solo que la limpieza a veces se olvidaba de reponer las toallas. El personal fue muy amable y servicial durante nuestra estancia.

recomendaría este lugar for una pausa momentánea

Acogedor ambiente, cómodo dormitorio, disfruté de un delicioso desayuno en la habitación con opciones variadas y la ubicación es excelente para explorar la ciudad gracias a la conexión de transporte cercana.

Todo fue increíble

Qué delicia las pastas hechas a mano! Las encontré en un restaurante cercano, Relais de Bretagne, que está a solo 20 metros del hotel. disfruté de un desayuno en la habitación que fue un verdadero manjar. El ambiente acogedor del hotel también me hizo sentir como en casa.

Aunque la estancia fue genial, los pasillos necesitan un poco de cariño y hubiera agradecido más toallas. Esa agua que me dejaron la primera noche no volvió a llenarse, pero eso no opacó lo bien que la pasé.

Encantador lugar para disfrutar de una noche tranquila en el corazón de Boulogne, y descansar en un ambiente cálido y acogedor.

La decoración con tema de tenis crea un ambiente único, y el desayuno estaba delicioso, especialmente con las opciones de pastelería. La atención del personal hizo que nuestra estancia fuera muy acogedora.

Me encantó el ambiente acogedor del hotel, con una decoración temática de tenis que le da un toque especial. El patio era encantador, e incluso disfruté de un delicioso desayuno en la mañana con una gran variedad.

Más atención a la limpieza en los pasillos.

el desayuno es bueno, con panaderia rica. el ruido del pasillo es inmenso.

La cama de matrimonio era súper amplia y cómoda, realmente dormí como un bebé. El lavabo era muy pequeño y el estilo del interior se sentía un poco antiguo. Lo mejor fue que, a pesar del ruido de la rotonda afuera, la ventana aislaba bastante bien. Decididamente, eso ayudó a que mi estancia fuera más placentera.